De vuelta...

Bueno, todo se acaba, así que ya estoy de vuelta, eso si, no os imaginais como he echado de menos el blog, y poder escribir de vez en cuando algo, así como leer vuestros posts, aunque ahora tengo ideas renovadas para varios días ;-) La verdad es que me han venido fenomenal estos días de descanso y desconexión... Os haré un pequeño resumen, aunque hoy estoy bajo los efectos del "jet lag", acabo de aterrizar en Madrid hace unas horas...

Empecé mi viaje rumbo a Nueva York, me apetecía un montón conocerlo, y la verdad es que me ha encantado. Además esta vez me apetecía conocer un lugar que me resultara cercano,ver museos, pasear por la ciudad... y en este plan nada mejor que Nueva York para poder disfrutar de todo lo que te puede ofrecer una gran ciudad.

He visto un montón de museos, el Metropolitan es espectacular, en el MOMA pude contemplar mi adorado cuadro de "La noche estrellada" y muchos otros preciosos. También tenía muchas ganas de ir al museo de Historia Natural, de pequeña siempre me gustaban esas películas en que unos niños iban a pasar un día al museo, con esos enormes dinosaurios a la entrada, y al final se quedaban allí a pasar la noche, un mundo maravilloso por descubrir...


En cuanto a la comida por las mañanas me cogía un café americano y unos bagels, y a comerlo por la calle, mezclándome con toda la gente que iba al trabajo, luego a mediodía entre museo y museo sólo me quedaba tiempo para tomar un "hot-dog" y una Coca-Cola sentada en la hierba del Central Park, una maravilla...














También subí al Empire State, espectacular la vista desde allí de todo Manhattan, es increible la cantidad de luces y rascacielos, parece que no fuera real, como si del decorado de una película se tratara.














También vi la Estatua de la Libertad, el museo de Ellis Island dedicado a los inmigrantes, y la zona cero, yo no había estado en Nueva York antes del 11-S, pero estaba tan acostumbrada a ver recortarse las torres gemelas en el cielo de postales y películas, que ahora notas un vacío, una herida abierta en una ciudad con una vitalidad y ganas de vivir inmensas.

Lo que más destacaría es la mezcla de culturas y gentes, un mosaico de todo el mundo. Me ha contagiado su dinamismo, esa "vidilla" que se respira por las calles...

Y después del ajetreo de la gran ciudad nada mejor que unos días en una tranquila playa del Caribe, así que me fui rumbo a Punta Cana, según llegas al aeropuerto de Santo Domingo, ya respiras la tranquilidad y parece que hubieras estado en NY hace semanas. Al final ni he hecho excursiones ni nada de nada, sólo disfrutar del mar, la playa y las palmeras. Ha sido un relax total, el hotel era un todo incluido de estos, hay que ver lo que les gusta a la gente los shows para turistas, y yo encantada, a esa hora es cuando mejor se pasea por la playa, no hay apenas nadie, sólo se escucha el sonido del mar, las hojas de las palmeras movidas por la brisa, en fin una delicia. El último día hasta pude ver salir la luna llena, si, si como lo leeis, fue precioso, en fin, que al final lo bueno de estos sitios es que cada uno puede encontrar lo que ha ido buscando...